Al filo de la noticia
En la Cámara de Diputados se vive una de esas discusiones que marcan rumbo, porque cuando se habla de agua no se habla de política a secas, sino de la vida diaria de millones de personas. En medio del debate por la nueva Ley General de Aguas, la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, salió a poner el freno de mano y pedir que nadie se deje llevar por las prisas.
La mañana en San Lázaro arrancó con ese ambiente espeso que se siente cuando una decisión legislativa puede cambiarle la vida a miles de personas. Y esta vez el tema es el agua, un asunto que en el papel parece técnico, pero que en la práctica define quién puede sembrar, producir y hasta sobrevivir en muchas regiones del país. Por eso, cuando se propuso adelantar la discusión de la nueva Ley de Aguas, el choque fue inmediato.
En la Cámara de Diputados el ambiente anda cargado, y no solo por la agenda de fin de periodo. El tema que trae a todos con el nervio de punta es la nueva ley de aguas, una reforma que suena técnica, pero que en la práctica podría moverle el piso a casi 600 mil familias con concesiones vigentes. Por eso, antes de que el dictamen llegue a su recta final, la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, decidió abrir la puerta a quienes serían los más afectados: productores del campo de 10 estados que viajaron a San Lázaro para ser escuchados.
En el Congreso mexicano se está moviendo una de esas piezas que, aunque suenan lejanas, afectan directamente cómo se investiga un delito, cómo se persigue a un criminal y qué tan protegido se siente cualquier ciudadano cuando algo sale mal. El Senado ya inició el proceso para elegir a la próxima persona titular de la Fiscalía General de la República (FGR), un cargo que no es menor: es, en términos simples, quien debe asegurarse de que la justicia funcione sin deberle favores a nadie.
En medio de tantas discusiones políticas que suelen quedarse atoradas en discursos, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, soltó un mensaje que rara vez se escucha con tanta claridad: si el país quiere mejores empleos y salarios dignos, instituciones y empresas tienen que sentarse a hablar de verdad, sin poses y sin simulaciones. Y lo dijo frente a la Concamin, el corazón industrial de México, donde están los que invierten, generan empleos y también los que vuelven realidad —o no— las políticas económicas.
En San Lázaro a veces hay pleitos que, con el paso del tiempo, terminan pareciendo ecos de otra época. Eso pasó con la vieja queja que la Cámara de Diputados había presentado en 2022 contra tres consejeros del INE por la discusión sobre la revocación de mandato. Como el tema nunca derivó en una afectación electoral real, quedó prácticamente como un trámite empolvado… hasta hoy, que la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, anunció que buscarán frenarlo formalmente para darlo por cerrado.
La presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, dejó claro que el país no puede seguir volteando hacia otro lado mientras miles de transportistas circulan con miedo por las carreteras. Su mensaje fue directo: las investigaciones deben dirigirse a quienes extorsionan, secuestran y matan, no a quienes salen a protestar exigiendo seguridad para poder trabajar sin que la delincuencia les arranque el sustento.
La Cámara de Diputados abrió sus puertas a una jornada distinta, más emocional que técnica, pero igual de política: las Conferencias Magnas por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, un recordatorio anual del tamaño de la deuda histórica que México tiene con sus ciudadanas. Aquí no hubo protocolos fríos ni discursos de trámite; hubo voces que cargan batallas reales, de carne y hueso.
La Cámara de Diputados abrió hoy sus puertas a un mensaje que, más que político, sonó a una sacudida de conciencia. En un salón lleno de legisladoras, activistas y madres buscadoras, la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, dejó claro que el Estado mexicano sigue teniendo una deuda enorme con las mujeres y que ya no hay espacio para postergarlo. Lo dijo con datos, con historias y con la presencia simbólica de dos mujeres que han resistido lo peor de la violencia: María Elena Ríos, sobreviviente de ataque con ácido, y Cecilia Flores, una de las madres buscadoras más conocidas del país.
Kenia López Rabadán asistió en Veracruz a los 200 años de la Independencia en el Mar, convocada por la presidenta Claudia Sheinbaum.
